Funciona a diferentes potencias, hasta 2KW. Útil para quienes no tienen inducción pero también para quienes la tienen pero quieren trasladar 'la placa' a un ambiente diferente (por ejemplo, un balcón o simplemente otra habitación).
Las dimensiones no son muy pequeñas pero sí contenidas y también se puede utilizar con sartenes grandes (siempre que sean de inducción).
Se ajusta fácilmente: configuras la potencia, la duración y listo. Tiene salidas de aire en el lateral para disipar el calor, por lo que conviene mantenerlo en una posición donde el aire pueda escapar y no en contacto directo con objetos a los que no les guste el calor.
Sugiero presionar el bloqueo inmediatamente después de configurarlo porque esto evita cambiar el programa sin darse cuenta.
Relación calidad/precio aceptable aunque se puede encontrar algo a menor precio, pero con un diseño más tradicional (p. ej. placa rectangular negra).